No hay nada como comer guisantes recién cogidos de la vaina cuando su dulzura está en su punto.
Entre 1829 y 1856, George Macculloch (1775-1858) anotó en su diario de jardinería las fechas en las que plantaba, las fechas en las que recogía y la distancia a la que plantaba sus cultivos cada año. En 1840, Macculloch escribió: "los guisantes tardíos nunca responden". Esto significaba que su segunda cosecha de guisantes no fue tan buena como la primera. A pesar de ello, según su diario de jardinería, Macculloch volvió a intentar plantar una segunda cosecha de guisantes en 1846. Aprendió que si plantaba la segunda cosecha entre 12 y 15 días después de la primera (el 20 de marzo) los resultados eran más satisfactorios.
Thomas Jefferson (1743-1826) también era aficionado al cultivo de guisantes y tenía 15 variedades de guisantes ingleses cultivados en su jardín. Jefferson y otros agricultores celebraban un concurso anual para ver qué granja podía llevar a la mesa los primeros guisantes de la primavera.
Recursos:
Si tienes niños melindrosos que no están interesados en comer sus guisantes u otras verduras, prueba a mostrarles estos vídeos.
Plante un cultivo tardío de guisantes para una cosecha de otoño según el calendario de siembra de su zona.
¿Necesita más razones para plantar guisantes? Lea 5 grandes razones para cultivar guisantes de la revista Garden Gate.
Tema: Ciencia Ciudadana, Cosas del Jardín
Edad / Nivel: Primaria